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¿Por qué no podan este árbol?

20.12.2017 - Obras, Servicios y Medio Ambiente

Plaza Nuestra Señora de Vico, 14 - 3º planta

            <<Durante miles de años hemos plantado árboles en nuestras calles y jardines, porque necesitamos belleza en nuestras vidas, y no deseamos olvidar por completo la relación que tenemos con el resto del mundo natural. Nos gusta tener árboles a nuestro alrededor porque nos confortan en verano con su sombra y con su capacidad de enfriar y refrescar el aire gracias a la transpiración. Modernamente ayudan a limpiar la contaminación del aire y suavizan el estruendo del tráfico. Hemos llegado a acostumbrarnos mucho a que los árboles formen parte de nuestro medio ambiente diario. Pero a pesar de nuestro aprecio por ellos, tendemos mucho a dar por hecha su presencia; tanto, en realidad, que a menudo los tratamos simplemente como objetos artificiales de adorno, más que como organismos vivos. Con demasiada frecuencia los plantamos y podamos inconscientemente, casi como si fueran construcciones humanas que pueden manipularse a  voluntad, sin consideración alguna con su propia naturaleza. Este es un punto de vista desgraciadamente miope, que a menudo se paga caro, no sólo a costa de la salud del árbol, sino también de la seguridad de las personas y cosas que les rodean, de la estética y también de la economía>>

“Poda de los árboles ornamentales”. Kenneth W. Allen; C.S.I.C. Real Jardín Botánico Madrid 1.986

 

            BENEFICIOS DE LOS ÁRBOLES EN LA CIUDAD.

            Tener árboles en las ciudades aporta beneficios estéticos, medioambientales, sociológicos y psicológicos e incluso económicos; pero también genera molestias; en forma de suciedad otoñal con la caída de hojas, ruidos molestos y suciedad por los excrementos de las aves que anidan en ellos, alergias para algunas personas, daños económicos por rotura de pavimentos, pérdida de vistas...

            A continuación haré una breve relación de los beneficios que aportan los árboles a los ciudadanos y que, es consenso internacional, están muy por encima de las molestias ocasionadas.

 

            1.- Beneficios estéticos: Es claro que para la inmensa mayoría la presencia de árboles en las calles, plazas y jardines aportan belleza al conjunto de la ciudad.

 

            2.- Beneficios medioambientales: Ante el grave problema de presente y futuro que representa el cambio climático los árboles colaboran en la minimización del problema mediante:

            -Retirada de CO2 de la atmósfera y aporte de 02en el diario proceso de la fotosíntesis.

            -Eliminación de contaminantes sólidos en suspensión, la mayor parte fruto de la imperfecta combustión de automóviles y por el desgaste de neumáticos, estos queda retenidos en la superficie de la hoja.

            -Reducción por sombreo de hasta 10º de la temperatura ambiente en verano que implica un ahorro energético en climatización.

            -Protección de pavimentos y fachadas, mediante el sombreo, de la agresión por  rayos ultravioletas de origen solar.

            -Amortiguación de los ruidos del tráfico (función de pantalla sonora).

            -Así mismo sirven de hábitat para  fauna de pequeño tamaño, redundando en el  aumento de la biodiversidad. Hacer constar  que las aves  insectívoras son el mejor aliado para el control de artrópodos (moscas, mosquitos...) como es el caso de los ruidosos estorninos que al ser omnívoros devoran diariamente innumerables insectos, haciendo más confortable la vida en la ciudad, a pesar de sus ruidos y de la suciedad por excrementos.

 

            3- Beneficios sociológicos y psicológicos. Está demostrado que las áreas con arbolado son lugares más agradables para el paseo, aportando sensación de confort y colaborando en la eliminación de la tensión nerviosa y emocional. Igualmente sirven como indicador del paso de las estaciones y se constituyen en  magnífica aula para el descubrimiento de la naturaleza por parte de nuestros pequeños... y también de los adultos.

 

            4- Beneficios económicos. Las viviendas situadas en la proximidad de áreas arboladas son más cotizadas respecto a similares en áreas sin arbolado.

            Concluyendo este apartado; los árboles en la ciudad constituyen un bien patrimonial de carácter social, histórico y paisajístico, estético y urbanístico. Como patrimonio es y debe ser, parte de la herencia de nuestros antecesores. Es un patrimonio difícilmente sustituible cuando se le agrede y/o suprime. Y como patrimonio de todos, sus beneficios pero también el cuidado del mismo es responsabilidad de todos.

 

 

            NECESIDAD DE LA PODA DE ARBOLES ORNAMENTALES

 

            << Un árbol situado en un medio que le conviene y al que se ha adaptado poco a poco, que no sufra coacciones especiales en su expansión aérea o subterránea y que no presente señales de debilidad  o  de ataques parasitarios, no necesita poda...El árbol es un ser vivo toda  poda puede considerarse, pues, como una agresión.>>

“ENMANUEL MICHAU La Poda de los árboles ornamentales Ed. Mundi Prensa 1987”

 

            En general, las labores de poda de los árboles de la ciudad deben limitarse a:

            Poda de ramas rotas o muertas, supresión de tocones para evitar que se conviertan en foco de ataques parasitarios o el principio de una pudrición interna (caso de los plataneros podados excesivamente)

            Eliminación de chupones cuyo desarrollo se realiza a costa de alimentación del órgano que le sostiene.

            Supresión de ramas estructurales mal dispuestas cuyo desarrollo cause daño o riesgo a otras.

            Eliminación de cualquier parte del árbol que entrañe un riesgo para los viandantes y/o impida la circulación.

            A partir de aquí, cualquier otra poda es  contraproducente para el normal desarrollo del árbol, si bien hay especies que toleran en mayor o menor mediada una poda continuada de gestión de la forma y/o del tamaño, estas labores deben entrar dentro de un plan claro de mantenimiento del arbolado y teniendo presente que:

            Las podas importantes deben ser excepcionales, constituyendo labores de apoyo al árbol, reequilibrando la estructura, aligerándola, reduciendo la acción del viento, aclarando la copa...

            Las podas severas como el terciado o el desmochado NUNCA deben ser llevadas a cabo, son técnicas que solo se emplean en momentos críticos para la salvaguarda del árbol, ante un trasplante, por ejemplo.

            Desde el punto de vista económico las podas continuadas y excesivas, al margen de los criterios anteriores, conllevan un importante coste económico y además deprecian el valor del arbolado. Por lo que nunca pueden estar justificadas.

 

            CRITERIOS DE PODA EN ARNEDO.

            Considerando lo anteriormente dicho y en consonancia con los criterios de la Sociedad Española de Arboricultura que propugna la “poda cero”. Desde el Servicio de Parques y Jardines se establecieron, a partir de 1.998, unos criterios de poda que a lo largo de los años se han intentado mantener y que son los siguientes:

            Todo el arbolado ubicado en parques, jardines y plazas ajardinadas se intenta que mantenga, en la medida de lo posible, el porte y tamaño propios de la especie teniendo presentes los criterios de seguridad, comodidad, economía y beneficios expresados anteriormente. En demasiados casos tratando de revertir actuaciones erróneas llevadas a cabo con anterioridad (como es el caso del desmochado al que se sometió a los álamos del Parque del Cidacos que en muchos casos ha conllevado la muerte de árboles o su arrancado por el peligro que entrañaban).

            Hay algunos caso de árboles que por motivos estéticos, se están conduciendo con una estructura muy rígida dado que la especie lo tolera bien; es el caso de los Cupressociparys Leylandii podados en cono de 16 mts de altura.

            En cuanto a las alineaciones en calles, principal motivo de queja de los ciudadanos, los criterios de poda son los siguientes:

            Cuando los árboles están ubicados en la acera junto a la fachada de un edificio, se intenta minimizar las incomodidades a los habitantes del edificio, independientemente del negro futuro que espera a la mayoría de esos árboles. Se presentan varias tipologías de plantación.

 

            Árboles de hoja perenne plantados en aceras junto a fachadas (el tronco a menos de 5 mts de la fachada) Se evita el desarrollo del árbol por encima de las ventanas del primer piso, dejando acceso a los garajes. Es el caso de Aligustres podados en semiesfera y de Encinas podados en cortina francesa.

 

            Árboles de hoja caduca de porte pequeño plantados junto a fachadas (el tronco plantado a menos de 5 mts) en este caso nos encontramos con los Prunus pisardii (ciruelos del japón) plantados por su importante floración primaveral y por el tono rojizo de su follaje. Estos árboles se despuntan intentando mantener la floración y evitando su desarrollo por encima de las ventanas del primer piso.

 

            Árboles de hoja caduca de porte mediano y grande plantados junto a fachadas (tronco ubicado a menos de 5 mts). Es el caso de Moreras y Plataneros en aceras. En este caso y a pesar del grave perjuicio que entraña para el ulterior desarrollo del árbol, se podan severamente eliminando los retoños del año a la altura del primer piso de viviendas. Se procura dejar el mayor número posible de yemas vegetativas para aumentar el número de rebrotes y conseguir un menor tamaño de estos, minimizando las molestias al ciudadano.

            Este año se inició de manera experimental, una segunda poda en verde de moreras para limitar su desarrollo en altura durante el periodo vegetativo. La experiencia parece ser positiva, por lo que este año se continuara con la misma.

 

            Arboles de hoja caduca de porte mediano y grande plantados en aceras a más de 6 mts de fachada “con calle por medio”. Estos árboles, dada la distancia de las fachadas a la que se encuentran, se tratan al igual que los árboles  situados en parques, buscando en la medida de lo posible su desarrollo lo más cercano posible a la forma y porte naturales. En estos casos, como en los de jardines próximos a viviendas, siempre que es viable, se podan las ramas para que no se aproximen a las ventanas a menos de 3 mts.

 

            Casos excepcionales. Hay algunos casos de árboles que no encajan en la  casuística anterior:

            Plataneros cerca de fachada (menos de 3 mts)  en Avda del Cidacos, estan orientados a  fachadas medianeras, sin ventanas, o con escaso número. hay dos casos de árboles de gran porte cerca de fachada, en los que se limitan las ramas que se aproximan a ventanas. Uno de ellos está próximo a ventanas de aseos, por lo que sus molestias son de menor grado. Se evita que las ramas causen daños a los tejados.

            Arboles próximos a las viviendas del Grupo Pérez Otaño. Dada la estructura de estas viviendas con habitabilidad desde la planta baja y que el ajardinamiento esta ubicado a poco más de 1 mt de distancia de las fachadas, el arbolado y los arbustos se reducen todo lo posible siempre y cuando estén ubicados hacia la luz natural. A los árboles orientados al norte que no restan luz a las viviendas se les permite un mayor desarrollo.

            Arboles en plazoletas y rincones ajardinados, es le caso de la C/ San Miguel, C/Sta Eulalia, Plaza San José, etc... se tratan como los ubicados en parques y jardines. Si bien aquí se tuvieron criterios de plantación de especies de porte pequeño y mediado o bien de desarrollo lento con posibilidad de control.

            Hay un último caso excepcional y que ha sido motivo de queja, es el caso de Avda. del Cidacos, en el se han podado 6 árboles a pesar de estar ubicados a más de 5 mt. de fachada y tener un pequeño tramo de calle frente a ella, en este caso se ha considerado que la proximidad a fachada estaba demasiado cerca del límite establecido y se ha establecido  con criterio “laxo” que se asimilan a los árboles de porte grande plantados junto a fachada (menos de 5 mts). El resto de la avenida no se ha podado porque entra claramente en los criterios de poda que se aplican a toda la localidad.

            Espero que lo anteriormente expuesto clarifique las razones por las que se lleva a cabo la poda en Arnedo, quizás quede algún tipo de poda no incluido en la relación anterior, sin lugar a dudas, fruto de un descuido mío, pero si se me pregunta por él, estoy seguro de que hay razones lógicas para llevarlo a cabo y estoy dispuesto a explicarlas.

 

            Fdo: Carmelo Pérez-Aradros Rodríguez

            Encargado de Parques y Jardines